martes, 3 de septiembre de 2013

AXELAY


POR: METALMAN
(Revisión 3.0)

Super Nintendo, a pesar de ser una de las máquinas más rebosantes de joyas, contó con muy pocos shoot´em ups realmente destacables, entre los que se puede incluir este pequeño tesoro técnico llamado Axelay.

Axelay era de esos juegos que dejaban huella, pues se trataba de un título portentoso a casi todos los niveles, y vino a demostrar que en Super Nintendo se podían realizar prodigiosos shoot´em ups sin sufrir ralentización alguna (algo que también demostraron los magníficos Super Aleste y R-Type III, entre otros).

Esto era consecuencia directa de la escasa velocidad que proporcionaba el procesador principal del “cerebro de la bestia”, cuyas especificaciones fueron muy criticadas de inicio por no pocos estudios de programación. Con el tiempo se demostró que, gracias a sus procesadores de apoyo dedicados, no solo tenía potencia suficiente, sino que era capaz de emplear rutinas increíbles y exclusivas a toda velocidad...siempre que la desarrolladora se molestase en exprimir sus capacidades.


Konami demostró ser, posiblemente y junto a Capcom, la desarrolladora de software lúdico más eficiente y virtuosa de aquel momento, deleitándonos, en este caso, con un tremendo juego de naves que mezclaba el desplazamiento horizontal y el vertical (al igual que en su día sucediese con el sobresaliente Salamander).




Casi cualquier aspecto de Axelay es destacable, haciendo especial hincapié en su peculiar sistema de armas, que nos obliga a alternar entre los tres modos disponibles: uno rápido (el típico disparo estándar), otro más potente y lento y un último modo que denominaremos de “dispersión”, el cual crea un disparo en forma de abanico, abarcando toda la pantalla (al mantener pulsado el botón de disparo se abre, y al soltarlo se cierra).También contábamos con un modo de disparo secundario, que añadía fuego de misiles.

He de mencionar que al ser alcanzados perdíamos el modo de fuego seleccionado en ese momento, dificultando enormemente el avance durante el nivel. Y lo complicaba debido a los patrones de los diferentes enemigos, quienes según su tipo eran más fáciles de derribar con una clase de disparo que con los otros. Como es lógico, al perder el último modo de disparo se perdía una vida.


Axelay también contaba con unos gráficos majestuosos, basados en el siempre deslumbrante chip “MD-7”. Todos los escenarios de avance vertical aparecían ante nuestros ojos haciendo un intensivo uso de esta magnífica técnica de "zoom y rotación".


En los niveles con desarrollo horizontal la famosa técnica dejaba paso a los clásicos mapeados con diferentes capas de scroll. Hay que reconocer que estos últimos niveles no impresionaban igual, aunque lucían estupendamente.




El diseño de los mismos también resultaba magnífico, y la calidad de su colorido era impresionante, así como la definición de todo objeto aparecido en pantalla: Simplemente sublime. Konami había creado un monstruo visual, y no exagero al decir que resultó en uno de los cartuchos más impresionantes del catálogo de Snes.

El apartado sonoro, como cabía esperar, no podía ser menos, contando con un fabuloso soundtrack que nos acompañaría en todas las fases, cada una con sus propias melodías y aderezado todo con unos FX de muy alto nivel. La BSO de Axelay se encuentra entre las más elogiadas del sistema, y no es para menos.

Pero algo falló! (desde mi punto de vista, claro). Algo muy a tener en cuenta: El juego solo contaba con 6 fases... Esto lastró de sobremanera al resto del producto, convirtiéndolo en un título tan breve, en comparación con las propuestas de la competencia, que hacía pensarse muy mucho su adquisición.


En mi humilde opinión, Axelay se queda justo en las puertas del Olimpo de los Shootem’ups, por culpa de este serio lastre, pues dos fases más lo hubieran convertido en un título mucho más atractivo y completo, además de duradero, contando también como aspecto negativo con la carencia de un modo a dobles.




Vale! juegos breves los ha habido siempre, y existen joyas dentro del género con limitaciones similares, pero en aquella época los videojuegos ya no contaban con tan breve duración (y me refiero a los títulos de sobremesa, que no a los arcades). Estos lastres eran más propios de los juegos de los 80, y el precio de Axelay era disparatado acorde a su duración (algo más caro que los cartuchos estándar).

Creo sinceramente que Axelay es un clásico de Super Nintendo, pero principalmente a nivel visual y sonoro, pues a nivel jugable son muchos los títulos que ofrecen una mayor profundidad y duración (sin menospreciarlo, vaya por delante).


A veces lo breve no es dos veces bueno (como reza el dicho) y en este caso queda patente que es una carencia muy importante, lastrando al resto de las virtudes del producto (que son muchas).


Aun con todo, y no quiero que se me malinterprete, Axelay es un cartucho indispensable dentro de su sistema, y uno de los juegos más espectaculares aparecidos en 16Bits, redondo en todos sus aspectos...excepto en su ya mencionada duración.




Axelay es un gran ejemplo de cómo realizar un trabajo técnico deslumbrante en 16Bits, y puede considerarse como uno de los mejores trabajos realizados por Konami en los 90. Es importante mencionar que sus programadores principales son Hideo Ueda y Kazuhiko Ishida, pertenecientes al fabuloso estudio TREASURE y también desarrolladores del mítico Rondo of Blood.  

Axelay, junto a los ya mencionados R-Type III y Super Aleste, conforma la trilogía más selecta de juegos de naves disponibles en SNES.




2 comentarios:

  1. Fue uno de los pocos juegos que tenia originales en super nintendo, y me lo sabía de memoria. Aunque alquilaba muchos juegos, este y Mario world eran mis favoritos.

    buena entrada!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por el comentario!

      A mi siempre me encantó Axelay, pero reconozco que de esa generación he preferido muchos otros shooters (Thunder Force IV, Super Aleste, R-Type III y Super R-Type).

      Saludos!!

      Eliminar