BROTHER

POR: METALMAN

Criticada por muchos, odiada por otros y querida por una minoría...A los directores asiáticos siempre les pasa factura rodar en Hollywood, y Kitano no fue una excepción. Veamos que nos depara Brother.

Pienso, y pudiera estar equivocado, que Kitano es uno de esos tipos que ya no tiene nada por demostrar: Cuenta con un estilo propio, sabe crear buenos guiones y es un auténtico monstruo de la violencia más explícita.

Por supuesto, esto no implica que todas sus obras sean igual de grandes o de importantes, aunque lo normal, y vuelve a ser un punto de vista propio, es que en todas encontremos una imagen, una escena o un diálogo que se nos grabe a fuego en el recuerdo.

Cuesta pensar en el "Beat" Takeshi humorista, en el pintor y en el poeta cuando se visiona una película que es toda una oda hacia la autodestrucción, pero ahí es donde reside la diferencia: Por muy serie B que sea, por muy poco presupuesto que posea e independientemente del tema a tratar y de quien lo protagonice, en sus films siempre hay un punto de humor negro y de arte que otros artistas no saben integrar.

Brother, por desgracia, es una de sus películas menos poéticas, ya que contó con un rodaje que parecía una carrera de Fórmula 1. Puede que el contenido literal fuese mucho más potente sobre el papel, pero lo mostrado en pantalla es tan fugaz, y tiene tan poco detalle, que se siente realizado con prisas.

Exceptuando el papel principal, interpretado por el mismo Takeshi, el resto de protagonistas y de antagonistas son planos en exceso: no se llega a sentir conexión alguna entre ellos, no se les puede odiar, y mucho menos querer. En conjunto, no queda claro el mensaje, y no se le da sentido estricto alguno a ese "Brother". 

Dejando ya en claro que no es un gran metraje, hay que decir que entretiene, que mola su punto yakuza y que contiene escenas bastante crudas. Aun siendo una película del año 2000, parece un film de pandilleros armados de los 80, y no es algo malo, pero sí un tanto extraño.

Lo mejor es Takeshi, convertido en un Aniki que bien podría ser la encarnación de uno de los jinetes del Apocalipsis (Muerte, en este caso), ya que es un personaje sin apenas diálogos, sin sentido (hasta casi el final) y que parece existir con el único fin de sesgar vidas.

Es un asesino visceral al 100%, sin clase, sin estilo y sin carisma, pero atractivo por ser tan racional en lo único que sabe hacer. Se trata de un hombre que ve como su clan se rinde ante otro rival, y que se siente traicionado por su hermano, quien firma la unión entre ambos.

Al no estar de acuerdo, y verse perseguido por no aceptar este pacto, decide marcharse a EE.UU, donde tiene un "hermanastro" al que recurrir.

Una vez llega a su destino, y tras ver que su pariente (nunca está claro del todo si son hermanos de verdad) se dedica a trapichear con asuntos de poca monta, decide intervenir y acabar con toda la competencia de la ciudad, convirtiendo a su nueva familia en el clan más peligroso del lugar.

Insisto en que es una película entretenida, y en que contiene esa esencia tan de Kitano, pero no esperéis mucho más. A destacar, a parte del maestro, la figura del yakuza que lo acompaña en su nueva aventura (Kato), ya que es el único actor que lo parte y que cuenta con un guión más distinguido (obra y gracia del gran Susumu Terajima). (Ren Osugi [el que firma la unión entre clanes] también merece una mención, por su dramático papel).

Hay acción, hay humor (muy poco y muy, muy negro) sangre y violencia por un tubo, además de dos personajes que llaman la atención...pero el resto es un disparate compuesto por actores muy poco inspirados y por líneas de diálogos vacías.

Es como que no todo va a juego: te enamoras del frío Aniki y del "romántico" Kato, pero todo lo demás es tan absurdo (parece una pandilla de gangsters de poca monta, de barrio) y tan hortera, que terminas por perder el sentido de la obra.

No os miento si os digo que me encanta, que la he visto decenas de veces (y las que me quedan) y que la recomiendo de corazón (es muy curiosa), pero buena...lo que se dice buena, no es.

Tras su rodaje dijo (Kitano) que no volvería a trabajar en EE.UU, y la verdad es que cualquier obra posterior ha sido mucho mejor. Puede que allí se trabaje de una forma muy distinta, y supongo que al maestro le sirvió, aun siendo un fracaso: Después de Brother supo lo que no tenía que hacer.

Lo dicho: no dejéis de verla (aun con esta nota), pero tampoco esperéis gran cosa.